Haití: La salud de niños, mujeres y hombres en las provincias afectadas por el huracán Matthew, dos meses después

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La respuesta de emergencia de MSF después del huracán Matthew.

1 de diciembre de 2016, Puerto Príncipe: Dos meses después del paso del huracán Matthew que devastó el suroeste de Haití, miles de personas continúan afectadas por la falta de vivienda adecuada, alimentos y agua potable. Algunas comunidades remotas aún no han recibido ayuda.
 
La organización médico humanitaria internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) sigue preocupada por el deterioro de las condiciones de vida, sobre todo en los departamentos de Grand’Anse, Sud y Nippes, que fueron los más afectados por el huracán.
 
En Sud y Grand'Anse, MSF gestiona clínicas móviles para evaluar las condiciones generales de salud de los niños. Chiara Burzio, coordinadora médica de MSF, explica que tan sólo la semana pasada las clínicas móviles de MSF “han permitido tratar a 163 niños menores de 5 años con complicaciones respiratorias, de los cuales el 60% tenían infecciones de las vías superiores y 5% padecían neumonía y bronquitis. Estas complicaciones suelen estar relacionadas con la falta de vivienda adecuada y el frío en las montañas por las noches. El resto de los niños presentaban diarreas e infecciones de la piel causadas por la falta de acceso a agua limpia".
 
 
El suministro de agua potable, un problema ya crónico que afecta a la mayoría de las comunidades en Haití, también fue interrumpido por el huracán. Las redes de tuberías fueron destruidas; los tanques de agua se llenaron de arena. "A pesar de que desde 2010 nuestro proyecto se especializa en la respuesta médica contra el cólera, la falta de actores para mejorar las condiciones de agua y saneamiento en Baradères después del paso del huracán nos llevó a realizar una intervención de emergencia para reparar la red de abastecimiento de agua y distribuir pastillas Aquatabs a 10,000 familias que viven en la ciudad", dijo Stuart Garman, coordinador del proyecto de MSF.
 
Muchas familias que perdieron sus hogares en el huracán todavía viven en refugios temporales, vulnerables ante las condiciones climáticas. Los desplazados que fueron alojados en las estructuras del Estado, tales como escuelas, tienen que enfrentarse a la presión de las comunidades locales, que piden a las autoridades que desalojen los locales de estas instituciones; de ahí la necesidad de que los desplazados internos puedan encontrar una solución duradera a su problema de alojamiento.
 
En noviembre, el número de pacientes con sospecha de cólera que fueron hospitalizados en el Centro de Tratamiento del Cólera (CTC) de MSF en Port-à-Piment, pasó de 7 en las primeras tres semanas a 12 durante la última semana del mes. La semana pasada el Centro admitió a un promedio de 7 nuevos pacientes por día, incluyendo los casos provenientes de los municipios vecinos. Estos nuevos casos confirmados también han aumentado en comparación con las cifras de las últimas tres semanas de noviembre. Los pacientes llegan a los centros de rehidratación oral que MSF abrió en las montañas y luego son transferidos a la estructura de MSF a través de dos ambulancias designadas para esta labor.
 
 
A partir del 4 de octubre, en colaboración con el Ministerio de Salud, MSF construyó un CTC de 20 camas en Baradères, en el departamento de Nippes. Además, MSF ha tratado a más de 190 pacientes de cólera en la zona metropolitana de Puerto Príncipe, y uno de sus equipos de vigilancia y respuesta rápida se encuentra actualmente en la Isla de la Gonave para responder al aumento de casos de cólera y muertes en la comunidad.
 
Garman dice que "la lucha contra el cólera depende principalmente de la sinergia entre la atención médica para evitar que los pacientes mueran de cólera, y de las actividades de prevención: incluyendo la mejora de las redes de abastecimiento de agua y las actividades de saneamiento para las comunidades que viven en situaciones precarias”.
 
Dos meses después de su intervención en Nippes tras el paso del huracán Matthew, el equipo de MSF comenzó el proceso de cierre de su intervención de emergencia en este departamento de Haití. Por diversas razones, la epidemia de cólera que el equipo había previsto finalmente no se manifestó en esta región. Las medidas adoptadas por la organización para evitar una epidemia sin duda contribuyeron a ello. Las actividades de emergencia continúan en el resto del país.
 
 

Siete semanas después del huracán los equipos de MSF han proporcionado:

CUIDADOS MÉDICOS

  • Consultas a 4,500 pacientes en Nippes, Grand’Anse y Sud.
  • Tratamiento de un gran número de lesiones (800 en total desde el 8 de octubre), infecciones respiratorias y casos de diarrea en el Sud y Grand'Anse en las clínicas móviles.
  • 30 pacientes trasladados en helicóptero, incluyendo 18 personas llevadas al Centro de Trauma de MSF en Tabarre, Puerto Príncipe.
  • Apoyo al hospital de Port-à-Piment, incluida la asistencia de 14 nacimientos desde el 31 de octubre

TRATAMIENTO PARA EL CÓLERA

  • Instalación de un Centro de Tratamiento de Cólera (CTC) en Port-à-Piment y tratamiento de 360 pacientes con sospecha de cólera desde el 9 de octubre.
  • Construcción de un CTC con capacidad de 19 camas en Baradères. Apoyo al Ministerio de Salud en el CTC de Diquini (Puerto Príncipe) para el tratamiento de 190 pacientes de cólera.

GESTIÓN DEL AGUA Y SANEAMIENTO

  • Se brindó apoyo en la higiene hospitalaria y el saneamiento de los CTC en los municipios de Morón, Chamberlain, Dame-Marie, Anse-d'Hainault, Irois y Abricots.
  • Distribución de refugios temporales para 1,400 familias en Sud y de 3,915 kits de higiene en el valle de Port-à-Piment.
  • Distribución de 2,752,000 litros de agua potable a las cisternas centralizadas: 1,867,000 litros en Sud y 1,792,000 litros en Grand'Anse, para lograr una capacidad de distribución de 80,000 litros diarios en Sud y 50,000 litros por día en Grand’Anse.
  • Rehabilitación dos sistemas de recolección de agua en el valle de Port-à-Piment y en los pueblos de Baradères y Fond Tortue.
  • Distribución de 32,424,000 litros de agua potable a través de cisternas centralizadas: 30,24 millones de litros para el sistema Baradères (un promedio de 864,000 litros por día durante 35 días) y 2,184 millones de litros para el sistema de Fond Tortue (312,000 litros por día durante 7 días).
  • Distribución de más de 3,5 millones de Aquatabs para el tratamiento de agua en el hogar en Sud, Grand’Anse, Baradères y Grand Boucan que permiten que la población de estas ciudades tenga agua potable por al menos dos meses.

DISTRIBUCIÓN DE MATERIALES 

  • Materiales para la reconstrucción, incluyendo tubos para recolectar el agua de lluvia y techos de lámina, kits de cocina, kits de higiene, tanques y mantas para 850 familias en las islas Cayémites.
 

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