Yemen: El sarampión amenaza la vida de los niños de Dhamar

Los niños y niñas sufren fiebres altas, erupciones cutáneas y complicaciones que podrían haberse evitado de haber recibido atención médica a tiempo.

Un médico de MSF examina a pacientes en la sala de aislamiento del hospital Al-Wahda, gobernación de Dhamar, Yemen, junio de 2025.
Un médico de MSF examina a pacientes en la sala de aislamiento del hospital Al-Wahda, gobernación de Dhamar, Yemen, junio de 2025. © Mohammed Khawamel/MSF

El sarampión es una enfermedad viral muy contagiosa que se propaga fácilmente en lugares concurridos y que puede provocar complicaciones graves, especialmente en niños y niñas menores de cinco años. Es especialmente peligroso para quienes ya padecen otras enfermedades o complicaciones. Aunque es una enfermedad potencialmente mortal, se puede prevenir mediante vacunas, que son la forma más eficaz de prevenir y controlar su propagación. La vacunación no solo protege a la persona, sino que también ayuda a lograr la inmunidad comunitaria, que es crucial para prevenir brotes de enfermedades.

 

Una enfermera registra los signos vitales de un paciente que se encuentra en la sala de aislamiento del hospital Al-Wahda, gobernación de Dhamar, Yemen, mayo de 2025.
Una enfermera registra los signos vitales de un paciente que se encuentra en la sala de aislamiento del hospital Al-Wahda en Dhamar, Yemen, mayo de 2025. © Mohammed Khawamel/MSF

 

“Tengo tres hijos: Amira, que es la única niña, y sus dos hermanos”, dice el padre de Amira. “Vivimos a dos horas del hospital más cercano. La gente de nuestro pueblo nos dijo que había un centro para tratar el sarampión en el hospital Al-Wahda, así que la traje aquí. Cuando llegamos, Amira estaba muy apagada; parecía sin vida. Pensé que moriría en cualquier momento”.

Al igual que el padre de Amira, muchas familias en Yemen viven el día a día con gran angustia. El sarampión va deteriorando poco a poco la salud de sus hijos e hijas y las opciones para que estos puedan recibir atención médica son escasas. En los últimos meses, la provincia de Dhamar, en el centro del país, ha sufrido un brote grave de esta enfermedad. Tras más de una década de conflictos que han devastado el país y que han reducido drásticamente el acceso a la atención médica, la población se ha vuelto enormemente vulnerable a padecer enfermedades fácilmente prevenibles.

Los niños y niñas sufren fiebres altas, erupciones cutáneas y complicaciones que podrían haberse evitado de haber recibido atención médica a tiempo.

“Al principio, pensé que era demasiado tarde para salvarla y que quizá era mejor dejarla descansar en casa hasta que llegara su hora. Pero cuando finalmente vine aquí, el personal médico del centro de aislamiento me tranquilizó”, explica el padre de Amira. “Me informaron sobre su estado y me prometieron que harían todo lo posible. Me convencieron de que la dejara en la unidad de aislamiento. Ahora tiene una nueva oportunidad de vivir, algo que nunca hubiera imaginado después de todo lo que ha pasado. Estaré eternamente agradecido al equipo que le devolvió la vida”.

Debido al continuo aumento de casos de sarampión durante los últimos meses, Médicos Sin Fronteras (MSF) ha estado proporcionando atención médica vital a los niños y niñas afectados por la enfermedad en Dhamar desde principios de abril.

Uno de los componentes clave de la respuesta de MSF es el equipo móvil de emergencia, que tiene una capacidad única para responder de forma rápida y directa a las necesidades médicas urgentes de las comunidades. El equipo puede movilizar rápidamente recursos, instalar clínicas temporales y proporcionar atención médica inmediata a quienes la necesitan. Esta capacidad de respuesta rápida es crucial para controlar la propagación de enfermedades transmisibles, como el sarampión.

 

Un médico de MSF examina a pacientes en la sala de aislamiento del hospital Al-Wahda, gobernación de Dhamar, Yemen, junio de 2025.
Un médico de MSF examina a pacientes en la sala de aislamiento del hospital Al-Wahda, gobernación de Dhamar, Yemen, junio de 2025.
© Mohammed Khawamel/MSF

 

El equipo está tratando actualmente a pacientes en la sala de aislamiento del hospital Al-Wahda, que tiene una capacidad de 40 camas. El equipo también brinda consultas médicas gratuitas a través de tres clínicas móviles que recorren seis distritos de la provincia. Dadas las dificultades a las que se enfrentan estos pacientes para acceder a la atención médica necesaria, el equipo también proporciona servicios de derivación y transporte de pacientes desde las clínicas móviles al centro de aislamiento y traslada los casos graves del centro de aislamiento a centros médicos más avanzados.

Entre principios de abril y mediados de julio de 2025, el equipo de MSF ha tratado a más de 1,400 pacientes con sarampión en el hospital Al-Wahda y en las clínicas móviles, siendo más del 56% de los pacientes niños menores de cinco años. Aunque es difícil identificar todos los factores que aumentan los retos de la lucha contra el sarampión y otras enfermedades fácilmente prevenibles, la existencia de importantes lagunas en los programas de vacunación rutinaria y el acceso limitado a los servicios básicos de salud desempeñan un papel fundamental en el gran aumento del número de pacientes con sarampión.

“No es solo en la provincia de Dhamar; en los últimos meses, en muchos otros lugares de Yemen se ha dado un preocupante aumento de casos de sarampión”, afirma Desma Maina, representante institucional de MSF en Yemen.

Esto se produce en un contexto en el que aumentan las necesidades de atención médica y en el que los ciudadanos tienen dificultades para acceder a ella: más de diez años de guerra e inestabilidad han provocado un grave deterioro de los servicios sanitarios en el país. Con la reciente disminución de la ayuda humanitaria y de la financiación internacional destinada al sistema sanitario en Yemen, la situación comienza a ser preocupante.

El brote de sarampión en las provincias yemeníes, incluida Dhamar, es un claro recordatorio de la importancia de la vacunación y de la necesidad de estar preparados para una intervención médica rápida en tiempos de crisis. Asimismo, es necesario reforzar las medidas preventivas y la participación de la comunidad, así como tratar los casos.

 

Fátima, de seis años, recibe atención en la sala de aislamiento gestionada por MSF en el hospital Al-Wahda.Gobernación de Dhamar, Yemen.
Fátima, de seis años, recibe atención en la sala de aislamiento gestionada por MSF en el hospital Al-Wahda. Dhamar, Yemen. © Faten Al-Hubaishi/MSF

 

A pesar de los importantes esfuerzos de los equipos de MSF, la magnitud de las necesidades requiere una acción más concertada y una respuesta integral y coordinada de todos los actores del sector médico para evitar que la situación actual se deteriore. No obstante, la organización mantiene su compromiso de apoyar el sistema médico en Yemen y de proporcionar asistencia médica a las personas necesitadas en diversas zonas.

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