En Ucrania, las personas encuentran formas de vivir con el trauma

Más de 4.6 millones de ucranianos están actualmente desplazados dentro del país, 160,000 de ellos en Vinnytsia. Desde abril de 2022, las clínicas móviles que gestionamos desde MSF han estado brindando primeros auxilios médicos y psicológicos en refugios alrededor de la ciudad donde se alojan las personas desplazadas. Para crear conciencia sobre el apoyo psicológico disponible, las y los promotores de salud de MSF llevan a cabo sesiones grupales dirigidas tanto a personas adultas como a niñas y niños. 

Alina Rosheva vivió en Mariúpol, al sureste de Ucrania, desde que era una niña. Y en febrero de 2022, escaló la guerra en Ucrania. 

Después de 20 días refugiándose en el sótano, Alina emprendió un largo y peligroso viaje con sus familiares. Pasó por una docena de puntos controlados por el ejército ruso, antes de cruzar la línea fronteriza para llegar a territorio controlado por el ejército ucraniano. Dirigiéndose hacia el oeste, a través de Zaporiyia, finalmente llegó a la ciudad de Vinnytsia, en el centro de Ucrania, que se ha convertido en su hogar temporal. 

“Teníamos una casa hermosa. Tenía un grupo de amigos. Miraba hacia el futuro con confianza”.

“Todo esto llegó a su fin en febrero de 2022. Todos nuestros familiares vinieron a unirse a nosotros en nuestro sótano. Éramos 13, jóvenes y viejos, tratando de sobrevivir como podíamos”, dice Rosheva. 

“Las explosiones eran tan fuertes que las puertas del sótano volaron”, continúa. “La decisión de irnos era obvia. Si nos hubiéramos quedado, no estaríamos vivos”. 

El apoyo psicológico ha hecho una diferencia tangible en muchas personas, especialmente en niños y niñas. 

“Cuando empezamos, la gente nos contaba que sus hijos e hijas simplemente se sentaban por ahí, sin comunicarse con nadie”, dice Mariana Rachok, una promotora de salud de MSF. “Nos alegra ver que, con el tiempo y las sesiones, comenzaron a jugar entre sí”. 

El programa de tratamiento depende del estado mental en el que la persona llega a nosotros. Pero implica un promedio de 10 a 15 consultas. 

Atención mental para el trauma relacionado con la guerra 

Los equipos de MSF en Vinnytsia pronto se dieron cuenta de que había una necesidad de atención especializada en salud mental para las personas que viven con trastorno de estrés postraumático (TEPT) como resultado del conflicto. En septiembre de 2023, MSF abrió un centro de trauma en Vinnytsia para personas con trastorno de estrés postraumático (TEPT) relacionado con la guerra. 

“La mayoría de los pacientes son personas desplazadas que han presenciado y sobrevivido a eventos increíblemente horribles”, dice la Dra. Lilia Savchenko. “Experimentan desesperanza, pesadillas, recuerdos recurrentes, ansiedad y desapego de otras personas. Estas son todas reacciones normales a eventos anormales”. 

“Pero si estas condiciones persisten por más de tres o seis meses, entonces esto es una indicación de que la persona tiene TEPT”, continúa la Dra. Savchenko. “A partir de entonces, es probable que empeore cada día”. 

El equipo de psicología de MSF actualmente atienden alrededor de 30 pacientes con consultas semanales. Los pacientes tienen una evaluación inicial, que consiste en una consulta con el personal médico y alguno de los psicólogos, quienes hacen un diagnóstico basado en pruebas y observación clínica, y diseñan un programa de tratamiento. 

En las consultas, el personal de psicología de MSF utiliza prácticas basadas en evidencia divididas en tres fases, adaptadas a las necesidades de los pacientes:

• Estabilización.
• Procesamiento del trauma.
• Reintegración en la vida social.

Estigma en torno a la atención de la salud mental 

Un síntoma común del trastorno de estrés postraumático es la resistencia para buscar ayuda. Esto a menudo se agrava por el estigma que existe en torno a la atención de la salud mental. 

“Existe una falta de comprensión sobre cómo funciona la psicoterapia y esto puede desanimar a las personas a buscar ayuda”, dice Andrii Panasiuk, psicólogo de MSF y supervisor de salud mental. “Aquí es donde la sensibilización juega un papel clave”. 

Para crear conciencia sobre el trastorno de estrés postraumático e informar a las personas sobre sus síntomas, nuestros equipos realizan sesiones con personal médico y con asociaciones de veteranos. También llevan a cabo sesiones de psicoeducación sobre los signos de TEPT durante talleres creativos y actividades artísticas con organizaciones locales para personas desplazadas como I’Mariupol o Jersón.  

Durante estas actividades, las y los promotores de salud se sientan y hablan con cada participante individualmente, para construir confianza. También trabajan para identificar a las personas que podrían beneficiarse del apoyo psicológico y motivarles a buscar atención. 

“A menudo hago comparaciones entre las lesiones físicas y mentales”, dice Rachok. “Si no desinfectas o tratas una herida, y simplemente la cubres y tratas de ignorarla, la herida solo empeora”. 

“No está en el poder del psicólogo traerte de vuelta tu hogar o a tus seres queridos, pero está en su poder ayudarte a encontrar formas de vivir con el trauma, a aprender a entender tus emociones, a enfrentarlas y a encontrar formas de ayudarte a ti mismo”. 

Comenzando a vivir de nuevo 

Lidia Bazualyeva fue desplazada de su hogar en Jersón y recibió apoyo de salud mental por parte de MSF para el TEPT que sufre. 

“Todas estas actividades creativas me ayudaron psicológicamente, al igual que la consulta con el psicólogo. Lentamente salí de este difícil estado postraumático”, cuenta Lidia Bazualyeva, una de las paciente beneficiada por los servicios de salud mental.  

“Ahora esta es mi única familia y nunca he perdido un evento facilitado por los promotores de salud. Cuando me comunico y comparto información, lentamente comienzo a vivir”, concluye. 

Alina Rosheva completó recientemente el programa de tratamiento para trastorno de estrés postraumático de MSF. 

“Asistí a muchas sesiones de terapia. Fue difícil”, dice Rosheva. “La recuperación no sucede de la noche a la mañana, es un proceso largo y complicado. Pero tres meses después de comenzar el tratamiento, dejé de tener ataques de pánico. Por fin, había aprendido a controlarlos y a lidiar con ellos”.

Hoy, Alina se encarga de organizar actividades culturales para la organización I’Mariupol. Ha construido un nuevo grupo de amigos en Vinnytsia y enfrenta el futuro con confianza nuevamente. 

En septiembre de 2023, nuestros equipos comenzaron a proporcionar servicios especializados de psicoterapia para personas con TEPT relacionado con la guerra en un nuevo centro de salud mental diseñado a medida en Vinnytsia. Desde entonces, hemos realizado cerca de 1,400 consultas y realizado 4,400 sesiones de concientización en la clínica o en organizaciones asociadas. Hasta la fecha, 81 pacientes han sido dados de alta del programa después de completar la terapia.