En la COP28, más fracasos no son una opción para las comunidades vulnerables

"Las personas más vulnerables del mundo están pagando con su salud y sus vidas por un problema que no crearon", dice el Dr. Christos Christou, presidente internacional de MSF
Andriamanantena Tsiva Aurélien (centro) con su familia frente a su casa, que fue parcialmente destruida por el ciclón Batsirai. Distrito de Nosy Varika, Madagascar, marzo de 2023. © Iako M. Randrianarivelo/MIRA PHOTO

Se está haciendo muy poco para proteger a las personas más vulnerables contra los impactos negativos del cambio climático. Los líderes mundiales reunidos en Dubai para la COP28 deben tomar medidas urgentes para proteger la salud de las comunidades más afectadas.

“Las personas más vulnerables del mundo están pagando con su salud y sus vidas por un problema que ellos no crearon”, afirma el Dr. Christos Christou, presidente internacional de MSF. “Es a la vez absurdo y trágico que quienes son los menos responsables de las emisiones que generan la emergencia climática tengan que sufrir las consecuencias. Esto demuestra que no sólo estamos en una crisis climática, sino también en una crisis de humanidad y solidaridad”.

La emergencia climática es una emergencia sanitaria y humanitaria. Los severos efectos del cambio climático en la salud ya están afectando a personas en todo el mundo y se prevé que aumenten con el tiempo a medida que siga subiendo la temperatura del planeta. MSF trabajamos en muchos de los entornos más vulnerables al clima del mundo y tratamos de primera mano a pacientes que experimentan los impactos del cambio climático en su salud.

En 2023, hemos atestiguado y respondido a las consecuencias de tales eventos, incluyendo inundaciones generalizadas en Sudán del Sur, ciclones severos en Myanmar, Madagascar y Mozambique, y calor implacable y sequías prolongadas que han llevado a millones de personas al borde de la hambruna en el Cuerno de África.

También hemos respondido a múltiples brotes simultáneos de cólera en varios países y a tasas alarmantemente altas de dengue en todo el continente americano. La combinación mortal de malaria y desnutrición ha mantenido nuestras salas de pediatría llenas en todo el Sahel, incluido el este de Chad, donde las personas huyeron del terrible conflicto en Sudán.

"Las personas más vulnerables del mundo están pagando con su salud y sus vidas por un problema que no crearon", dice el Dr. Christos Christou, presidente internacional de MSF
Dr. Christos Christou Presidente internacional de Médicos Sin Fronteras. © MSF/Pierre-Yves Bernard

 

“Este no es un problema futuro; está sucediendo ahora. Lo vemos en nuestras salas de espera”, afirma el Dr. Christou. “Y esto está sucediendo porque el liderazgo político global no ha cumplido sus compromisos de frenar las emisiones ni sus promesas de ayudar a los países más afectados a adaptarse”.

Mientras las partes participantes en la Conferencia hacen balance de los avances para alcanzar los objetivos climáticos, ya está claro que la falta de acción climática ha puesto en gran riesgo la salud de las personas. No lograr limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados es una amenaza existencial para muchas personas en los contextos humanitarios en los que trabaja MSF.

Las comunidades y países más afectados han solicitado repetidamente, pero sin respuesta, el apoyo que necesitan para hacer frente a las consecuencias del cambio climático. Necesitan un compromiso real para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y necesitan apoyo financiero y técnico concreto.

Estas comunidades precisan ver una acción climática que iguale la escala de la emergencia climática. El mundo no puede seguir observando cómo las crisis humanitarias se vuelven más graves y las personas más vulnerables del mundo siguen soportando las consecuencias.

“No podemos permitirnos otro fracaso”, afirma el Dr. Christou. “¿Cuántos años más pasarán, cuántas COP más y cuántas vidas más se verán afectadas –o se perderán– antes de que se decidan y apliquen medidas concretas?”.

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